Quisiera instaurar desde hoy una tradición que espero mantener en el tiempo. En la mayoría de nuestras vidas, pasamos por el día a día tan acelerados que ya ni siquiera nos da tiempo a apreciar los logros que conseguimos. Es más, cuando alcanzamos un hito, en lugar de pararnos a saborearlo lo apartamos como si fuera un pequeño listón que debíamos superar y nos centramos en lo siguiente. Y así acabamos, año a año, pensando el siempre manido 'qué rápido se me ha pasado'.
A ello se une el hecho de que muy pocas veces podemos agradecer a la gente de nuestro alrededor lo que hacen por nosotros. Sean grandes o pequeños, hay una suma de éxitos personales que vienen instigados por una chispa exterior y que en ocasiones damos por normal cuando en realidad tiene un mérito tremendo. A pesar de que nos encaminemos hacia una sociedad colaborativa.
Así que hoy, por primera vez y de forma pública, quiero dejar constancia de las personas que me han marcado en 2015. Parafraseando a los clásicos, quizá me deje alguien, pero obviamente lo hago sin mala fe. Y si me lo hace notar, rectificaré oportunamente este post al respecto. Que para eso vivimos en la era digital.
- Gracias a mi mujer María José. Por haberme dado a mi hija y porque con su forma de vivir permite que la mía pueda llevarse a cabo. Y también por enseñarme a pedir perdón cuando el orgullo me lo impide
- Gracias a mi hermano Quico, por demostrarme cada día que incluso en un trabajo menos estimulante de lo que querría se puede ser feliz con pequeñas cosas. Y por ser la única persona que conozco que mantiene a un grupo de 30 amigos desde la infancia
- Gracias a mi familia de Almussafes, por entender que nos veamos menos de lo que querríamos pero no echármelo en cara. Al contrario, acogerme como si nos cruzáramos por la calle cada día
- Gracias a mis primos, tíos y sobrinos de Andalucía. Con ellos empezó el cambio este año. Y nos enseñaron a vivir de otra manera
- Gracias a Ángel Sanz. Una persona que me inspira, que me insta a ser mejor, a la que admiro y con la que voy a tener la inmensa fortuna de trabajar en 2016. Un inicio así sólo puede traer cosas buenas
- Gracias a Mario y Jose, no sólo por formar parte de Pasarela Comunicación sino por convertirse en un equipo capaz de hacer que la gente que vale la pena tenga reflejada su historia en los medios. En muchas ocasiones, para acabar cambiándoles la vida. A mucho mejor
- Gracias a Queralt Castellet. No es un cliente más. Me abrió su corazón en el momento más difícil de su vida y mi gran triunfo ha sido poder ayudarla
- Gracias a Miguel Coll, por darme un espacio en su vida radiofónica hablando de cualquier cosa. Y en la personal, hasta dejándome dormir en su casa
- Gracias a Rafa Lupión. Por ser mi ejemplo de persona. Empresarialmente, a nivel negociador y de pararle los pies a cretinos que creen que su trabajo es más importante que el de otros
- Gracias a todos los que han elegido ser mi familia en el programa 'El mundo que viene' de Radio Emprende. Tanto a los excepcionales colaboradores que tengo y que son el alma del espacio como a aquellos que han decidido apostar por la radio online para escucharnos
- Gracias a Edu García, Pablo Juanarena y Valentín Martín por seguir creyendo en mí para retransmitir eventos deportivos en Radio Marca. Uno de los sueños de mi vida que está a punto de cumplir 10 años de felicidad
- Gracias a Rafa Gandía, por devolver el hockey a mi vida y convencer a sus protagonistas de que podría ayudarles a llegar a Rio 2016. Lo hemos conseguido
- Gracias a Rodrigo, Laura y Ángel por pensar que valía la pena ofrecerme escribir en revistas como 'Tapas' y 'Mine'. Es una de las partes que más me flipa de mi trabajo
- Gracias a Jaime, Usue y Julia por darme espacio para hacer lo propio online en '5 Barricas', 'Nubelo' y 'Mamiconcilia'. Desde esas plataformas peleamos por cambiar el mundo a los freelance (y por contar historias de gastronomía y deporte, de paso)
- Gracias a Ángel, a Vicent y a Eva, que se han empeñado en que trabajemos juntos cuando en otra época hubiéramos sido competencia y con quienes me siento como en casa a nivel de visión profesional
- Gracias al propio Vicent, al otro Vicent y a Santi por esos almuerzos mensuales haciendo quinielas sobre escaños
- Gracias a Entrenar.me y Plug and Play por enseñarme el lenguaje de las startup y abrirme un nuevo camino laboral en mi vida
- Gracias a Rodrigo, Eva, Moisés, Almudena, David y un sinfin de periodistas que me ayudan a hacer públicas historias que estaban en el anonimato. Sin ellos no sería quien soy, porque no podría hacer lo que hago
- Gracias a Josete y Pedro por ofrecerme dar clases en Masters, una de mis viejas aspiraciones en las que me lo paso como un enano
- Gracias a los fundadores, los colaboradores y los redactores de Esportbase por creer que podría ayudarles. En poco más de un mes ya nos sentimos capaces de ir reeducando el complicado mundo del fútbol base
- Gracias a Azahar, La Pitanza, L'Alfabega y Black Turtle por procurarnos momentazos maravillosos maridados con cocinas excelentes
- Y gracias a Olga y Javi por presentarnos a Germán y Carito. Hemos descubierto de golpe la enorme conjunción de cuatro seres especiales
Todas estas personas han marcado o incluso cambiado mi vida en 2015. Y seguro que lo harán más aún en 2016. Sólo quería decírselo.
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