Nunca se podrá demostrar pero, ayuda en algo a la gente que en los informativos de la televisión solo se hable de la crisis? Incita a los desequilibrados a maltratar a la gente el hecho de ver que es algo que se hace en nuestra sociedad? Aumentan las revueltas las imágenes constantes de éstas en países africanos?
Quizá esto podríamos trasladarlo a la vida diaria, más allá de lo que veamos en las pantallas de nuestros hogares. Cuántas veces habéis tenido al lado una persona que solo transmitía pesimismo y os lo ha contagiado? En coaching, se habla de gente tóxica, porque no solo no te aporta nada sino que te arrastra con ella a su particular espiral negativa.
Existen, sin embargo, personas que te cambian la vida. Y es tanta su influencia que acaban ganando muchísimo dinero (en general) por la inspiración que transmiten y por la escasez que suponen. Son, normalmente, aquellos que escriben libros que ayudan a millones de personas, que dan conferencias a empresas para que mejoren sus números y que, incluso en casa, intentan que los que les rodean mejoren su existencia y encuentren la felicidad.
Es con gente como ellos (porque he tenido la suerte de conocer a algunos, como Rafa Olcina o Álex Penadés) con quien he hablado una y cien veces de la importancia de la comunicación. Estamos, sin duda, en la era de la misma. Millones de personas reciben en tiempo real cualquier información que quieran en sus ordenadores, tablets o smartphones. Y están comenzando a consumir lo que les gusta de verdad. Y a defenestrar lo que no les gusta.
El ejemplo más claro lo hemos tenido en esta semana que concluye. Un twittero, una sola persona, inició en una red social un artículo de rechazo a que el programa La Noria entrevistara a la madre de un implicado en el asesinato de Marta del Castillo. Cuatro días después, las principales marcas que se anunciaban en ese espacio retiraron su publicidad. En total, una pérdida estimada de 640.000 euros. Y en audiencia ni hablamos.
Por ello, es muy posible que la primera televisión (clásica o por internet, que aquí ya no hay distinciones) apueste solo por dar buenas noticias seguramente se posicione por encima de las demás.
Imposible? Quizá. Siempre habrá malas noticias, desde luego, pero a lo mejor basta con hacer en los informativos una sección fija de 15 minutos donde solo se refleje lo bueno que es capaz de hacer la humanidad. Habría que ver qué nivel de audiencia alcanza esa franja.
Al final, si La Noria ha tenido publicidad negativa en toda España (y parte de Europa) quien intente hacer algo diferente seguramente obtenga el efecto contrario. Y eso, en este mundo donde la información viaja a la velocidad de la luz, podría convertirse en una idea de éxito. Y posiblemente, de dinero.
Para esto he creado hace poco mi telediario especial de buenas noticias. A ver si os gusta. Saludos
http://telediariodebuenasnoticias.blogspot.com/
Publicado por: Vic | 13/12/2011 en 13:23